
Una preocupante seguidilla de ataques a colectivos se registró en el departamento Chimbas, donde al menos 14 unidades de la empresa Albardón SRL fueron apedreadas entre el martes 15 y el domingo 20 de julio.
Afortunadamente, no se reportaron personas heridas, pero sí daños materiales considerables que afectan tanto al servicio como a la seguridad de conductores y pasajeros.
Uno de los ataques más recientes ocurrió mientras una unidad de la línea 407 circulaba por el barrio Santa María. Según informaron, un desconocido arrojó una piedra que reventó uno de los cristales laterales. Aunque no hubo lesionados, el chofer debió interrumpir su recorrido y cambiar de unidad para continuar prestando servicio.
Otro episodio tuvo lugar en la intersección de calles 25 de Mayo y Díaz, cuando una unidad de la línea 40 fue alcanzada por una piedra que destruyó dos ventanillas. En ese momento, una mujer viajaba sentada junto al vidrio, pero resultó ilesa de manera milagrosa.
La tercera situación se produjo en el barrio 2 de Abril, también con la línea 407 como blanco. Una roca impactó contra el vidrio lateral, causando su rotura.
Desde la empresa Albardón SRL manifestaron su preocupación por la frecuencia y la violencia de estos hechos, que se han vuelto casi cotidianos. También solicitaron mayor presencia policial y medidas preventivas en las zonas más conflictivas.





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