La Encuesta de Actualidad 2024 de la entidad que representa a las empresas del sector exportador, arrojó que “transcurridos los primeros meses de la nueva administración y teniendo en cuenta las normativas a la vista (DNU, Ley Ómnibus, paquete fiscal, disposiciones BCRA, etc.),  el 69% de los exportadores considera que no tiene incentivos suficientes para aumentar inversión, empleo y exportación”.

A pesar del balance deficitario, el estudio reflejó que “una proporción casi idéntica (69,9%) tiene la expectativa de que los factores que considera más relevantes tendrán inicio de solución en los próximos 12 meses”.

Al respecto, “los encuestados consideran que los factores regulatorios locales que más perjudican la actividad exportadora son: 1) las dificultades para realizar pagos al exterior, 2) la falta de recupero impositivo, 3) los tipos de cambio múltiples, 4) las obligaciones relacionadas con la liquidación de divisas y 5) las restricciones sobre los pagos de fletes”, mientras que “en los sectores que pagan derechos de exportación, esto se incluyó como tema crítico”.

Asimismo, afirman que para que las exportaciones aumenten más del 30%, “los principales factores domésticos que deberían ser abordados son, además de los anteriores (51%), la reducción de la carga impositiva (14%), la ampliación del acceso al financiamiento (9%), el valor del tipo de cambio (5%), el fortalecimiento del relacionamiento externo (5%), la mejora del sistema logístico (5%), una mayor institucionalidad (4%), el avance en procesos de facilitación del comercio (4%) y las mejoras en la promoción comercial (3%)”.

En cuanto a la expectativa sobre el resultado que obtendrá el comercio internacional este año, “el 47% de los encuestados prevé un aumento en sus exportaciones comparado con 2023, el 31% espera una caída y el 22% cree que no habrá cambios”.

Actualmente, desde CERA estiman que las exportaciones totalizaran un ingreso de US$77.003 millones para 2024, lo que implica un 15% más que los US$66.788 millones registrados en 2023.

Entre las estimaciones recabadas, los sectores más optimistas son minería, petróleo y gas, junto con varios sectores agroindustriales que prevén una recuperación luego de la sequía de 2023. En contraste, los sectores menos optimistas para este año son el automotriz y los de bienes industriales.

En relación a este último rubro mencionado, la encuesta revela que “para los exportadores de bienes que utilizan servicios logísticos, los dos factores que más perjudican su actividad son el costo de transporte terrestre por carretera (31,2%), el costo portuario (26,7%, destacado especialmente en Puerto de Buenos Aires) y la infraestructura deficiente (19,3%)”.

En cuanto a la manera de incentivar un mayor desarrollo del MERCOSUR, “más del 90% de los encuestados consideró fundamental o importante tanto la facilitación de la operatoria transfronteriza y mejora en infraestructura como la generación de una agenda de mejoras en las barreras no arancelarias”.

En ese aspecto, se puntualizó sobre “la importancia de avanzar en acuerdos de armonización regulatoria y reconocimiento mutuo, sobre todo para las industrias alimenticia y farmacéutica”.