El sanjuanino Giménez, en medio de una inédita crisis en el Rojo y las amenazas de los hinchas

La renuncia del presidente Doman profundizó la debilidad institucional del club de Avellaneda, a menos de una semana del clásico con Racing. Los barras prometieron "balas para todos" los integrantes del plantel donde está el ex San Martín.

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Cuando en enero, el sanjuanino Matías Giménez Rojas (24) partía hacia Avellaneda con un bolso cargado de ilusiones, nunca se iba a imaginar en la pesadilla en que se iba a convertir la estadía en Independiente, a los pocos meses.

El 60% del pase del delantero fue adquirido por el Rojo tras la negociación con la dirigencia de San Martín. Era el tiempo en el que la esperanza renacía en el Rey de Copas por la impronta que trataba de imprimirle a su gestión el periodista Fabián Doman, que había asumido como presidente en octubre de 2022.

Giménez sorprendió a los hinchas en su debut ante Boca en un amistoso de verano en el estadio San Juan del Bicentenario. Tanto que el por entonces DT Leandro Stillitano lo eligió como su artillero para empezar la Liga Profesional 2023.

Aunque con el paso de los partidos, el sanjuanino perdió el puesto con el experimentado Martín Cauteruccio. Pero siempre ingresó en el segundo tiempo y tuvo buenas actuaciones. Inclusive pudo convertir su primer gol oficial en la elite ante Colón de Santa Fe, de penal. Y cuando echaron a Stillitano, que se fue envuelto en impotencia por los malos resultados, Giménez continuó en la consideración del técnico interino Pedro Monzón.

Para ese tiempo, Doman ya había avisado que el sindicalista Hugo Moyano, anterior presidente, le había entregado el club en una situación financiera más delicada de lo que él creía. Se demoró la contratación del nuevo entrenador, los malos resultados continuaron, los hinchas explotaron y los barras fueron muy lejos: "Ganen o balas para todos" y "el día que matemos un dirigente van a dejar de robarnos" fueron algunas de las repudiables pintadas que aparecieron en el club.

Ese contexto, sumado a la cercanía con la zona de descenso (el equipo está en el puesto 25 en la tabla, con 9 puntos, superando sólo a Arsenal, Atlético Tucumán y Unión), provocó que el presidente decidiera renunciar a su cargo este martes y profundizó una crisis que no tiene precedentes en el Rojo. Un momento comparable únicamente con el descenso a la B en 2013.

En medio de esa grave situación quedó el talentoso jugador surgido de la cantera verdinegra, quien seguirá en el banco en la visita de su equipo a Rosario Central este miércoles. Mientras que el domingo, en medio de este clima adverso y con el vicepresidente primero Néstor Grindetti reemplazando (por tres meses) a Doman, el sanjuanino y sus compañeros deberán afrontar el clásico ante Racing.