El ministro de Infraestructura de San Juan, Fernando Perea, lanzó una dura advertencia sobre el estado de la Ruta Nacional 40 en su tramo norte, que conecta con el departamento Jáchal: “Está destruida”, sentenció.
Perea explicó que, mientras en el tramo sur ya hay 120 operarios trabajando activamente en tareas de mantenimiento y mejora, la zona norte presenta un cuadro crítico. “La verdad que es desastroso el estado en que está”, afirmó.
Uno de los factores que motiva la premura del Ejecutivo provincial es el eventual repunte de la actividad minera en la zona norte. Según indicó Perea, si el sector se reactiva, aumentará notablemente el tránsito pesado por ese tramo de la Ruta 40, lo que haría aún más peligrosa la circulación en las condiciones actuales. Por ello, no descartó que la Provincia adelante fondos para comenzar con las obras, en busca de luego obtener respaldo del sector minero.
“Es un costo elevado, pero hay que tomar una determinación. El gobernador ya lo está trabajando. Las empresas mineras serán las principales usuarias de ese tramo”, remarcó el funcionario.
Por otro lado, se refirió a las obras sobre la Avenida Libertador. En ese sentido, Perea aclaró que los trabajos no están concluidos: “Se colocó una capa niveladora y se repararon losas de hormigón. Falta la geogrilla y la capa final de pavimento. Evitamos cortar el tránsito para no generar caos vehicular”, justificó.
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