
La UTA se desmarcó del paro general y el 10 de abril los colectivos circularán con normalidad
Actualidad05/04/2025
La Unión Tranviarios Automotor (UTA) dio un golpe sorpresivo a la estrategia de la Confederación General del Trabajo (CGT) al anunciar que no se sumará al paro general convocado para el 10 de abril.
Con esta decisión, los colectivos en todo el país funcionarán con normalidad el próximo jueves, una noticia que, en el contexto actual, ha generado expectativas encontradas.
La razón de la postura de la UTA se encuentra en la vigencia de la conciliación obligatoria dictada por el gobierno de Javier Milei la semana pasada. Esta medida surgió en el marco del conflicto salarial que atraviesa el sector del transporte en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). La conciliación obligatoria, que obliga a las partes a resolver el conflicto sin interrumpir los servicios, ha sido clave en la decisión del sindicato, que aunque se mostró en principio a favor de la huelga nacional, optó por no acatarla para no incurrir en una violación legal.
Fuentes del sindicato explicaron que, según el consejo de los abogados de la UTA, la conciliación obligatoria es de carácter vinculante y no puede ser ignorada. A pesar de que la CGT promueve el paro general como una respuesta a los problemas económicos del país, la UTA se ve obligada a cumplir con la resolución del Gobierno que garantiza la continuidad del servicio de colectivos en un contexto de negociación salarial.
La UTA había programado previamente un paro para el 28 de marzo en protesta por la falta de una actualización salarial adecuada para los choferes, pero el Gobierno dictó la conciliación obligatoria, forzando la suspensión de la medida de fuerza. Ahora, la decisión de no adherir al paro general del 10 de abril no hace más que reforzar la idea de que los intereses sectoriales del transporte público están por encima de la convocatoria general.
En San Juan, la noticia de la postura de la UTA ha generado una gran repercusión. Los empresarios del transporte en la provincia ya habían manifestado que, en caso de que los choferes a nivel nacional se sumaran al paro, estudiarían medidas de protesta propias. Sin embargo, con la determinación de la UTA de mantener los servicios, el panorama para el 10 de abril parece ser diferente, al menos en lo que respecta al transporte público.
La situación refleja una vez más las tensiones dentro de los sectores sindicales y cómo los intereses locales y sectoriales pueden tomar rumbos diferentes a las decisiones nacionales. Mientras la CGT lucha por la visibilización de sus demandas a nivel global, la UTA prioriza las necesidades inmediatas de su gremio, alineándose con las medidas legales que buscan proteger la continuidad del servicio público.
De esta manera, el 10 de abril, aunque marcado por la protesta general convocada por la CGT, no afectará la circulación de colectivos, al menos en las rutas más importantes del país, y en San Juan no se verá alterado el servicio, al contrario de lo que se esperaba inicialmente.