Economistas alertan por una inflación del 2,5% en diciembre y un 2026 desafiante

Analistas privados proyectan una inflación mensual de 2,5% para diciembre y estiman que la inflación anual de 2026 podría situarse entre 16% y 26%, complicando la meta oficial del 10%. La suba en precios de la carne y ajustes en tarifas reguladas son factores clave.

Las proyecciones privadas sobre la inflación revelan un panorama mixto para el Gobierno, tanto para este cierre de año como para 2026. Se espera que la inflación anual de 2025 no supere el 31%, la cifra más baja desde 2017, cuando fue del 24,8%, manteniéndose la tendencia desinflacionaria.

Sin embargo, para diciembre se anticipa un aumento mensual elevado, en torno al 2,5%, influenciado principalmente por la fuerte suba en el precio de la carne, que alcanzó incrementos de hasta el 10,5% mensual y tiene un impacto significativo en el índice general. Además, los ajustes en precios regulados, como tarifas de gas, electricidad y transporte, contribuyen a esta presión al alza.

 
Respecto a 2026, el nuevo esquema de bandas cambiarias, que ajustará el tipo de cambio según la inflación de dos meses atrás, junto con otras variables macroeconómicas, complica el cumplimiento de la meta oficial del 10% anual fijada en el Presupuesto. Según el economista Sebastián Menescaldi (consultora EcoGo), la inflación podría cerrar entre un 16% y un 26%, dependiendo principalmente del ingreso de capitales externos y otros factores como el blanqueo fiscal.

El dato oficial de inflación de diciembre será publicado por el Indec el próximo 13 de enero. Según Claudio Caprarulo, director de Analytica, el primer trimestre de 2026 mantendría niveles similares de inflación mensual a los registrados a fines de 2025, destacando que las proyecciones macro del Presupuesto están desactualizadas y que una inflación mensual promedio de apenas 0,8% para cumplir la meta aparece poco probable.

Complementando esta visión, la economista María Castiglioni (C&T Asesores Económicos) proyecta un 16% anual para 2026, tomando en cuenta un escenario con menos volatilidad cambiaria, buen superávit comercial y mayor ingreso de inversiones, aunque advierte que alcanzar el 10% sigue siendo complejo.

 
Desde la Fundación Libertad y Progreso, Iván Cachanosky estima una inflación de diciembre en 2,2% y señala que la desinflación continuará con altibajos en 2026, pero que la meta del 10% anual es demasiado ambiciosa, proponiendo un objetivo más realista alrededor del 15%.

Por último, Florencia Iragui (consultora LCG) pronostica una inflación mensual de 2,5% para diciembre y una inflación anual cercana al 22% para 2026, resaltando que la actualización de las bandas cambiarias y pagos de deuda dificultarán la desaceleración del ritmo inflacionario.