La caída en el consumo se debe principalmente a que los consumidores priorizan cortes más baratos como carne molida y osobuco, dejando de lado el asado, que casi no se vende.
El sector de las carnicerías en San Juan enfrenta un escenario complicado debido al aumento de los costos fijos y una notable disminución en la demanda. Claudio Silva, propietario de Frigorífico Don Iñaki, expresó que la situación económica es desafiante, con precios de la carne que fluctúan, aunque se mantienen en torno a los $4.400 por kilo, dependiendo de la calidad del animal. La caída en el consumo, que ronda el 40% en comparación con el año anterior, se debe principalmente a la difícil situación económica de los consumidores, que priorizan cortes más baratos como carne molida y osobuco, dejando de lado el asado, que casi no se vende.
Silva también mencionó que el panorama es complicado para otros colegas del rubro, especialmente debido a los altos costos de alquiler y otros gastos fijos que siguen aumentando. La mayoría de los pagos ahora se realizan mediante tarjetas de débito o transferencias, lo que marca un cambio significativo en el comportamiento de compra de los clientes.
Orlando Rodríguez, de Trozadero Don Orlando, también comentó que las ventas han caído un 50% y que la situación se ha vuelto más difícil, especialmente con el aumento de los servicios públicos, como la electricidad en verano y el gas en invierno. A pesar de estos desafíos, ambos empresarios mantienen la esperanza de que la situación mejore en la segunda mitad de 2024, esperando una estabilización que les permita recuperar las ventas.
Fuente: Diario La provincia
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